Espacio del lector

En medio de este contexto es que veo en una red social un cartel de un negocio tucumano que me llamó la atención. El mismo tenía escrito la siguiente leyenda: “En este negocio. No se vende mercadería a personal policial”.

Lo que comenzó con un reclamo salarial se transformó en reclamos, miedo, corridas, heridos, malestar, perdidas, muertes y lo más triste, terminó dividiendo un país que hace tiempo que se sigue dividiendo y fragmentando. No solo se trata de intentar mostrar los saqueos sino de ver el fenómeno de miedo que llego a nuestras calles para quedarse.

Hasta que los argentinos no aprendamos a hacernos cargo de lo que nos toca y sobre todo a medir las consecuencias de nuestros actos es que seguiremos encontrando culpables. Todos tienen la culpa y no hay culpas, por mientras no sabemos quién nos va a defender.

Por Marcos Gallardo, Profesor de Lengua y Literatura

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