Desde guardaparques se mostraron molestos porque, según comentaron, los involucrados son cazadores furtivos reincidentes.
Días atrás personal de guardaparques de Malargüe, en un control de rutina, detectó a un vehículo sospechoso, de color gris, y al intentar interceptarlo emprendieron la huida hacia la ruta 181, con destino hacia Fortunoso, según comentaron a este medio los guardaparques que participaron del procedimiento.
En su huida los sospechosos dejaron tras unos yuyos dos bolsas de residuos negras. El sujeto que arrojó las bolsas se dio a la fuga campo traviesa, sin detenerse al llamado de los guardaparques. En tanto que la camioneta, marca Mitsubishi, siguió su marcha. “El vehículo se detuvo en el puesto del señor Olivera, en Agua de la Zorra”, precisaron los guardaparques.
Según consta en la denuncia, los guardaparques retornaron al lugar donde el sospechoso había arrojado las bolsas negras. Al ser revisadas encontraron dos choiques eviscerados. “Nos quedamos en el lugar, para esperar a que volvieran a buscar los choiques y efectivamente volvieron y allí se inició nuevamente una persecución”, agregaron.
Después de un trabajo coordinado con otras movilidades de guardaparques y personal policial de Bardas Blancas, lograron detener la marcha de los sospechosos. “La situación fue muy tensa, nos amenazaron y tuve que intervenir la policía”, recalcaron los guardaparques a este medio.
Entre guardaparques y personal policial escoltaron la camioneta hasta un control policial, en Bardas Blancas y allí los detuvieron e identificaron. “Dos de ellos son de apellido Olivera y son reincidentes en la caza furtiva”, precisaron los guardaparques. Los tres involucrados fueron multados por la Ley de Fauna y además se les secuestró un cuchillo.