Estamos transitando un año electoral y, en épocas de elecciones, el odio y la desinformación pueden convertirse en obstáculos para la democracia y la convivencia. Es crucial que como ciudadanos de Malargüe, nuestra casa, tomemos medidas para fomentar un ambiente de respeto y claridad.
El Papa Francisco nos recuerda que «la unidad es superior al conflicto». En este sentido, debemos buscar puntos de encuentro, incluso en nuestras diferencias, para construir juntos un futuro más justo. Combatir la «cultura del descarte» y promover una «cultura del encuentro» son pasos esenciales para lograrlo. Esto implica escuchar activamente, valorar las opiniones de los demás y rechazar cualquier forma de odio o exclusión.
Un desafío importante en este contexto es evitar las fake news, que a menudo se utilizan como herramientas de denostación y desinformación. Para combatirlas, es fundamental verificar la información antes de compartirla, confiar en fuentes confiables y fomentar una cultura de pensamiento crítico. Como dice el Papa Francisco, «la verdad es una compañera inseparable de la justicia y la misericordia».
En Malargüe, podemos liderar con el ejemplo, promoviendo un discurso basado en hechos y rechazando la manipulación.
En tiempos de falta de credibilidad en la política, los valores se convierten en un faro que guía nuestras acciones. La honestidad, la empatía y el compromiso con el bien común son esenciales para reconstruir la confianza en nuestras instituciones y líderes. Como comunidad, debemos exigir transparencia y ética, pero también practicar estos valores en nuestra vida cotidiana, demostrando que el cambio comienza con cada uno de nosotros.
Los medios de comunicación tienen un papel fundamental en este proceso y una gran responsabilidad social. No solo actúan como intermediarios de información, sino que también pueden influir en la percepción pública y en la construcción del debate democrático. Es esencial que ejerzan su labor con ética y compromiso con la verdad, evitando la difusión de noticias falsas o manipuladas. La objetividad y el pluralismo informativo fortalecen la democracia, permitiendo que los ciudadanos accedan a distintas perspectivas para formar su propia opinión sin caer en la desinformación ni la polarización extrema.
La educación también juega un papel fundamental. Informarnos sobre los candidatos, sus propuestas y los procesos electorales nos permite tomar decisiones fundamentadas. Además, debemos ser críticos con la información que consumimos, verificando fuentes y evitando compartir contenido dudoso.
Finalmente, recordemos que Malargüe es nuestra casa. Cuidar nuestra comunidad implica promover valores de unidad y solidaridad, especialmente durante las elecciones. Cada acción que tomemos para evitar el odio y la desinformación contribuye a fortalecer nuestra democracia y nuestra convivencia.
Esto estamos haciendo por Malargüe, por eso Tenés que saberlo.
Por Intendente Celso Alejandro Jaque