Daniel Ferreyra, entrerriano, de profesión Gendarme, arrancó hace ocho años con un programa radial en FM Pehuenche, basado en la cultura folclórica del Litoral. En la sintonía de la radio los chamamé comenzaron a sonar con mayor frecuencia y de manera progresiva se fueron difundiendo las vivencias, idiosincrasias, costumbres y leyendas de los pueblos del Litoral.
La idea de armar un programa radial siempre estuvo presente, pero nunca se animaba, recuerda Daniel Ferreyra. El 21 de junio del 2006 comenzó la programación de FM Pehuenche y se ofreció un espacio a quienes estuvieran interesados, fue allí cuando Daniel, acompañado por Oscar Ortega, presentó su proyecto y un 16 de agosto del 2006 nació “El Rincón del Chamamé”.
Después de dos meses, su compañero radial tuvo que pedirse una licencia y levantar el programa parecía ser la única alternativa. Sin embargo, Miguel López, Director de la FM, le propuso continuar con la propuesta. Si bien Ferreyra no se sentía seguro por su falta de experiencia pero Carlos Mena le extendió una mano y lo sacó adelante, según explicó Daniel a Malargüe a Diario.
“En un principio era un desastre, pero con el tiempo fui adquiriendo un poco más de experiencia, escuchaba a los demás referentes de las otras radios y poquito a poquito fui aprendiendo, además de algunos cursos….y bueno salió,” recordó nuestro entrevistado.
Con el paso del tiempo el programa radial se afianzó. La línea de programación se basa en tomar por cada transmisión una provincia e informa sobre la cultura de la misma, como así también brinda información tanto de la letra de las canciones como así también sobre los artistas. Esto lo posicionó como único en toda la provincia de Mendoza y por ende, único en Malargüe y se lo decretó de interés provincial, por el Gobierno de Mendoza. Como consecuencia, el Rincón del Chamamé pasó a participar de varios premios a nivel Nacional y se convirtió en uno de los preferidos a la hora de recibir galardones.
Este programa se transmite todos los sábados de 12 a 13:30 por FM Pehuenche, como así también por radio 89.3 FM “Fénix” de la ciudad de Mercedes de Buenos Aires y también por 95.1 FM “la radio que se ve”, de la ciudad de Gualeguaychu, Entre Ríos,
A principio de mes Daniel recibió un nuevo premio que se entregó en la ciudad de Bahía Blanca. El galardón, de nivel nacional, lleva el nombre “Fortaleza Protectora Argentina y si bien el Ferreyra no pudo asistir a la entrega por problemas de salud, su programa fue ganador con más 120 medios de distintas localidades del país. De este modo, una vez Daniel Ferreyra dejó en lo más alto a Malargüe, sin ninguna colaboración y apoyo de nadie.
Historia del premio Fortaleza Protectora Argentina
Cuando el Coronel Ramón Estomba funda la ciudad, organiza un fuerte denominado Fortaleza Protectora Argentina, con forma de estrella y sus cuatro puntas hacia los puntos cardinales. Al Oeste se va a señalar la ubicación de la plaza de la población; si bien este delineamiento va a tener corta vida ya que poco después, en 1834, los planos indican un nuevo trazado de la ciudad, en donde la plaza ocupa el lugar actual, desalojando el sitio de la primitiva comisaría y el campamento de los portugueses, existentes desde 1828.
Construcciones
La construcción del fuerte demandó cuatro meses. El muro o terraplén del fuerte era un polígono irregular de veinticuatro lados cuyo diámetro era de 260 metros, su altura de 4 metros por 4 metros de espesor y estaba rodeado por un foso de 5 metros de ancho por 5 metros de profundidad.
Alrededor del fuerte se levantaban las viviendas de los oficiales, así como la de expedicionarios que concurrían a establecerse en el lugar. Cabe destacar que todos los edificios estaban construidos de una forma rudimentaria y carecían de las más elementales comodidades. Hacia el noroeste se hallaba el único portón de madera con un puente levadizo.
Completaban la construcción los edificios de la Comandancia, del cuerpo de guardia y tropa, polvorines, cuarteles y en el centro un mangrullo.
Los edificios se hallaban dispuestos de tal manera que dejaban un patio central.
El cuerpo de guardia estaba a la izquierda de la entrada y la Comandancia a la derecha. El bastión Sur había sido destinado al polvorín.
Para la caballada se había formado un corral con empalizada hacia el lado Sureste.
Tales eran algunas de las características más notables de esa última avanzada de la civilización que daba su cara al océano y sus espaldas a la Sierra de la Ventana, tras de la cual se extendía la pampa monótona y hostil donde los vientos peinaban las cabelleras hirsutas de los aborígenes y las crines de sus veloces corceles, sin que nada hiciera pensar que se avecinaba el día cuando la pampa se transformaría en el mar de oro con espigas de trigo que saludarán reverentemente al caminante…