Caminaron un kilómetro con sus dos pequeños. Reclaman que se dio prioridad a la limpieza de caminos que llegan a la zona de cabañas.
La tan ansiada y esperada nevada trajo alivio a varios sectores de nuestra población pero también algunos trastornos; como le sucedió a la familia de Soledad Baigorria, cuyo puesto se encuentra a un kilómetro del Puente del Pedrero, cercano a la laguna de la Niña Encantada.
“Nosotros caminamos desde mi casa hasta el Pedrero, que hay un kilómetro, con los dos niños de 6 y 3 años; la pasamos mal, estuvimos encerrados dos días con los niños, nos quedamos sin alimento para ellos, leche principalmente, y tuvimos que salir caminando”, manifestó para Malargüe a Diario Soledad quien agregó que, para colmo de males, el hecho de haber estado sin luz durante casi 48 horas hizo que no pudieran comunicarse vía telefónica para pedir ayuda: “No teníamos cómo comunicarnos, no teníamos carga”.
Ante esta situación, el marido de Soledad se dirigió a caballo, en dos ocasiones, hasta la zona de Vialidad Provincial a pedir ayuda: “Franco Letelier, quien estaba encargado de la máquina de la Municipalidad, no nos quería abrir el camino, tuvo que salir mi marido dos veces a caballo hacia Vialidad porque ahí es donde paraba la máquina, para hablar con ellos porque no nos querían abrir el camino; le rogó mil veces al señor Letelier que viniera al puesto”.
Según contó Soledad, el empleado municipal habría alegado que tenía prioridad el camino que llegaba a la zona de cabañas donde había gente enferma: “Tenían que limpiar primero ese lugar; hasta el momento nadie de la Municipalidad ha venido a ver cómo estamos ni si nos hace falta algo”.