El desafío consistía en recorrer un circuito de 90 kilómetros en plena selva misionera y, aunque Hernández no llevaba demasiadas expectativas, pudo superar la meta antes que nadie.
La competencia, realizada el pasado 19 de setiembre, comprendía recorridos de 10 kilómetros para principiantes, 21para media maratón, 42 para maratón y 90 para ultramaratón. Participaron corredores de distintos países de Sudamérica como Paraguay y de Brasil.
La malargüina contó a Malargüe a Diario que si bien hace seis años que compite en duatlones y maratones, esta vez se sorprendió por su rendimiento. “Había hecho más fondo para los 42 K de San Juan pero en esta corrí dos horas por día y, a veces, los domingos no entrenaba o alternaba con bici para cuidar mis rodillas”, explicó.
Al respecto, agregó que “a diferencia de otras disciplinas, en esto juega un papel muy importante la cabeza, la concentración”, relató, además de que “el clima cálido y húmedo de la selva misionera es muy distinto al nuestro”.
La carrera comenzó a las cinco y media de la mañana. “Nos levantamos a las dos, desayuné y, a las tres, nos llevaron hasta la largada, unos 100 kilómetros más abajo. Llegué, más o menos, a las tres de la tarde”, recordó.
“El recorrido era por un sendero angosto con muchas subidas, y al ser la primera vez que recorría esta distancia, tuve que ir despacio. Al principio decidí correr más rápido para hacer más kilómetros antes de que saliera el sol pero llovió así que tuvimos que correr en el barro, bajar la velocidad pero mantener un ritmo contante hasta llegar a la meta”, prosiguió.
Finalmente, Hernández destacó que fue divertido y disfrutó mucho del paisaje.