El director municipal de Seguridad Ciudadana, Sandro Canales, junto a los dueños de los tres boliches bailables de Malargüe comunicaron a la prensa local una serie de medidas que se comenzarán a aplicar. Estas son:
• Hacer un estricto control para que los menores no ingresen a dichos lugares
• No permitir el ingreso de ninguna persona al local después de la hora 2:30
• No vender bebidas alcohólicas después de la hora 4:30
• Aplicar el derecho de admisión en los locales para toda persona que genere hechos de violencia dentro o en sus cercanías, en cualquiera de ellos
El objetivo es proteger a los clientes de los boliches como así también a quienes viven o transitan cerca de ellos.
Con respecto al horario límite de entrada al boliche, Canales dijo que se pensó en esto “para evitar el proceso de las previas que hacen algunos jóvenes y que los lleva a llegar alcoholizados y producir conflictos”.
Aclaró, además, que “a cualquier persona que produzca conflictos en cualquier boliche se le prohibirá la entrada en el resto de los locales bailables por un tiempo, de acuerdo a la gravedad del hecho producido, es decir, que se verá impedido de ingresar a todos los lugares, no solo en el que haya creado problemas”.
“Es necesario que logremos acuerdos por la paz de todos y por la de ellos también. Fuera del control externo la Policía Vial, va a haber controles en los boliches ya que nos preocupan ciertos eventos que han sucedido”, agregó.
Todos los presentes en la conferencia hicieron hincapié en llamar a la conciencia de los padres y adultos en general, quienes prestan su lugar para que los jóvenes hagan una previa. “Los chicos están comprando mucho alcohol y tenemos que empezar a saber que nunca se sabe qué pasa cuando un chico consume mucho alcohol y sale afuera, no solo porque manejan sino porque se pueden ver envueltos en situaciones de violencia. Podemos perder un hijo porque se va a la cárcel o porque lo lastiman y la verdad es que es tarde para lamentarse después que suceden los hechos. Por eso, pedimos que todos trabajemos en esto”, enfatizó el funcionario.
Con respecto a los menores de edad, se volvió a hablar de la posibilidad de comenzar a organizar noches llamadas M17, que son fiestas específicamente armadas para menores. La idea es que, por lo menos, un día por fin de semana, uno de los tres boliches acepte menores, donde, por supuesto, no se va a vender alcohol.
Con respecto a la venta de alcohol, el responsable de Rentas, Fabián Carrasco, aclaró que se necesita el entendimiento de los dueños de los boliches. “El control de esta área se tiene que hacer en toda la ciudad. Los inspectores deben pasar por todos los locales y quioscos para que no vendan alcohol. Entonces, como nosotros no estamos toda la noche, necesitábamos el compromiso de los dueños de los boliches para que cuando el inspector no está presente sean ellos quienes hagan cumplir las reglas”, explicó.
Por su parte, los dueños de los locales bailables explicaron que los inconvenientes se dan en la vía pública más que en el interior de los mismos e insistieron en solicitar la ayuda de los padres de los jóvenes. “La sociedad tiene que colaborar”, sostuvieron.