Así lo expresó Santiago Ortiz, dueño del campo donde fue detenido por la Policía Rural cuando perseguía, junto a unos amigos, al puma que aparentemente se había cobrado la vida de varios chivos, según explicó.
A raíz del último operativo realizado por la policía rural días atrás, en el que se detuvo a un rastrojero azul y a sus ocupantes y en donde se encontró en la parte trasera del vehículo un rifle calibre 22 largo tipo carabina (con culatin retráctil con cargador colocado en el cual llevaba 7 proyectiles punta hueca), entre otros elementos, uno de los involucrados, y dueño del vehículo que fue requisado, Santiago Ortiz dio su versión de los hechos.
“No había ningún control ni nada de eso, se metieron adentro de un campo privado de nuestra propiedad, donde estábamos siguiendo a un puma que nos hizo mucho daño, nosotros nunca entramos a la ruta”, manifestó Ortiz y agregó: “La Policía Rural se metió por un camino interno del campo por donde nosotros veníamos y nos atravesó el vehículo por delante. Nosotros seguíamos a un animal que hizo mucho daño, a un vecino le mató 70 animales. Yo nunca estuve imputado, sólo fui a la comisaría a firmar un acta y me retiré, no estuve detenido. Las armas de fuego no eran mías, yo sólo tenía un cuchillo. Un amigo mío llevaba un arma de uso personal, un 22”, expresó el dueño del campo.
Ortiz relató que el sábado 15, muy temprano a la mañana, salió junto a algunos amigos en busca de un puma que había atacado reiteradas veces al ganado de esa zona, a tan sólo 7 kilómetros hacia el sur de nuestra ciudad. Cuando iban saliendo por un camino interno del campo, ya que el animal se dirigía hacia allí, es que esta camioneta de la Policía Rural los intercepta, según su versión. “Se bajaron con las armas en las manos y nos hicieron descender del rastrojero apuntándonos, sin preguntarnos nada, no nos escucharon, solamente nos agredieron verbalmente, nos trataron malísimo”, relató.
Ortiz aprovechó para realizar su reclamo y el de muchos crianceros de la zona: “Nosotros estamos sufriendo muchos daños por el puma, no tenemos ni una defensa ni del gobierno local ni provincial. Imagínese que una noche le matan 70 animales, otra noche matan 10, y no es un solo león, andan 5 de esos, si agarran un piño lo dejan sin nada y no tenemos ni una defensa. Yo le digo a la Policía Rural que venga por el robo que hay pero nos andan persiguiendo adentro de nuestros campos, ellos tienen que controlar en la ruta, no en un camino interno de un campo privado”.
Para los crianceros, la pérdida de parte de sus piños en manos de los pumas es moneda corriente. “Setenta animales es mucha plata y no la recuperamos, los gobiernos se llenan la boca para el Festival del Chivo pero no tenemos ni una defensa, nosotros estamos manteniendo a los leones con nuestros animales. Es mucho daño lo que estamos sufriendo y no tenemos ni una defensa. Ellos están protegiendo a los pumas pero a nosotros quién nos protege”, concluyó Ortiz
