Deslumbró en la segunda jornada de prueba del Club. Estará a préstamo por un año.
Carolina Bibanco Andrade tiene 12 años y un sueño muy claro: jugar en Boca Juniors y hacia allí va encaminada. Juega desde los 8 años en diferentes divisiones del “Depor”; tenía que probarse el 28, 29 y 30 de marzo para entrar al Club Deportivo Godoy Cruz Antonio Tomba, luego debía volver y quedarse durante dos semanas para enfrentar una segunda prueba. “El segundo día de la primera prueba, luego que la viera el coordinador que está a cargo de la primera y reserva femenina y encargado de supervisar las categorías sub 10, sub 13, sub 15 y sub 17, junto al profesor Pablo Cabana la vieron y dijeron que no hacía falta la segunda prueba ni verla más, que la querían como jugadora definitiva del Club”, manifestó para Malargüe a Diario Isabel Andrade, mamá de “Carito”.
Hoy día, Carolina es parte del plantel del sub 13 y cabría la posibilidad de que jugara en la categoría sub 15; tiene titularidad como volante por izquierda y 9 por derecha.
Los entrenamientos de Carito son de lunes a jueves de 16:30 a 18:30 pero ella solo estará viajando a Mendoza miércoles y jueves ya que no tiene dónde quedarse y faltaría mucho a la escuela, ya que no cuenta con la licencia deportiva, “los sábados viajaría para competir pero ya tomamos la decisión de irnos a vivir allá para apoyarla, estamos gestionando el lugar donde vamos a vivir, que tendría que ser en Godoy Cruz, porque entrena en el predio Las Canteras”.
Isabel también informó que Carito firmó para participar de la Liga Mendocina de Fútbol y ya es jugadora oficial del Club Godoy Cruz, “y jugaría otro torneo en el que participa la sub 13 femenina de Godoy Cruz”.
Además ya debutó frente a Independiente a Rivadavia en la categoría sub 13 como local, ganando 7 a 1 con dos goles de la malargüina.
Por otro lado, Isabel se mostró muy agradecida con el Club Deportivo Malargüe, ya que fueron muy accesibles: “Le dieron la oportunidad, la dan a préstamo por un año ya que el pase es del Deportivo; igualmente, Carito está a prueba por si no logra adaptarse y decide volver a Malargüe” y con la escuela Bustos Dávila, ya que le están otorgando el permiso para faltar al colegio; “ella se lleva su indumentaria y sus útiles para ir completando las tareas, no deja sus obligaciones de lado”.
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