Esta actividad está siendo convocada por la organización malargüina Vuelo de Mariposas que junto a otras instituciones y con la comunidad en general van a marchar. Será desde la plaza central de la ciudad hasta el reloj a las 17 y a las 13 harán una concentración en el espacio verde mencionado con anterioridad. Allí tienen planificado llevar adelante una serie de tareas en la que participarán todos los presentes.
Roxana Bernales, integrante de Vuelo de Mariposas, habló con nuestro medio para hacer extensiva la invitación a todos los vecinos de Malargüe y le pidió a todas las personas asistan, de ser posible, vestidas de negro. A eso agregó que quienes puedan lleven un par de zapatillas, de mujer o de niña que estén en desuso, ya que realizarán una instalación artística en el lugar.
La iniciativa es a nivel país y surge como forma de protesta contra la violencia de género. En esta oportunidad se pedirá justicia por Lucía Pérez, la joven de 16 años que fue drogada, violada, torturada y asesinada en Mar del Plata entre el sábado 8 y el domingo 9 de octubre. Consecuentemente afirmó que marcharán también por todos los femicidios que han ocurrido este último tiempo.
Cabe destacar que el caso de Lucía tuvo gran repercusión y por ende fue el disparador de la iniciativa que se llevará a cabo mañana. Tampoco debemos olvidar que mientras esta jovencita vivía este dramático hecho, en Rosario se habían convocado unas 70.000 personas en defensa de la igualdad de género y contra la violencia.
Acompaña a la convocatoria el siguiente mensaje: “En tu oficina, escuela, hospital, juzgado, redacción, tienda, fábrica o donde estés produciendo, pará una hora para exigir ‘Basta de violencia machista, vivas nos queremos'». El cese de actividades está programado desde las 13 y hasta las 14.
“‘La idea de parar apunta también a visibilizar el aporte de las mujeres a la economía productiva y las desigualdades que aún existen en cuanto a la posibilidad de desarrollo laboral y profesional. La brecha salarial entre hombres y mujeres en Argentina se ubica entre el 30 y 40 por ciento en los trabajos precarizados, el 76 por ciento del trabajo doméstico no remunerado lo hacen las mujeres, y cuando nacen los hijos e hijas la tasa de actividad de las mujeres baja del 54 al 39 por ciento», explicaron a La Nación desde la organización Ni Una Menos.