El llamado a licitación para la restauración del Molino Rufino Ortega está en marcha y algunas empresas ya se dieron cita en el departamento para recibir la información necesaria para efectuar sus propuestas. La primera apertura de sobres se realizará los primeros días de febrero, lo que permitirá que a fines de ese mes se pueda iniciar la obra. La misma tiene un valor aproximado de un millón de pesos.
Algunas de las tareas contempladas son la colocación de canaletas para el agua y detalles en las luminarias, el cierre perimetral, la instalación de cámaras de seguridad conectadas con la policía, el reemplazo de las ventanas y el cambio de sus vidrios por cristales de alto impacto.
Malargüe a Diario dialogó con el director del CRIDC y encargado del Molino, Ángelo Praderio, quien manifestó que el deterioro exterior de este monumento histórico nacional es de gran magnitud, mientras que el interior se encuentra intacto.
Por otro lado, dijo que se está analizando si las puertas de dicho lugar permanecerán abiertas durante la restauración ya que en los últimos 20 días han recibido la visita de unos 2500 turistas.
Recordemos que el Molino Rufino Ortega es una construcción de adobe con barro, posee techo de jarilla y cabreada de madera y todo esto hace difícil el mantenimiento de dicho patrimonio cultural.
Praderio señaló que, una vez terminada la obra, el objetivo es realizar actividades en el patio con las escuelas y dar mayor seguridad en el sitio para poder mantener mejor la construcción.