Por Mayra Ferreyra
En esta oportunidad fueron cuatro los exponentes vinculados a esta actividad: la Senadora Provincial y Presidenta de la Comisión de Hidrocarburos Minería y Energía Silvia Calvi, el Profesor y trabajador de la empresa minera Goland José Bravo, el propietario de Ailinco S.A. René Chaumont y Eduardo Vázquez responsable del Fondo de la Transformación en Malargüe.
Entre las diferentes posturas a favor y en contra de la actividad se destacó la preocupación de los malargüinos con respecto a los controles y cuidados del ambiente, como así también quiénes serían los encargados de estas revisiones y cómo se harían.
“La Provincia de Mendoza tiene preparado todos los equipos para el control estricto en minería, existe la policía minera, están los inspectores, pero lamentablemente todavía no nos han dejado actuar porque no tenemos un proyecto. Pero yo doy la seguridad de que los equipos para el cuidado del medio ambiente están preparados, la legislación existe y el recurso humano está adiestrado para eso,” aseveró la Senadora Silvia Calvi.
En cuanto a la misma preocupación José Bravo relató su experiencia como trabajador de minería y los cuidados que se realizan. “Trabajé en San Juan, en una empresa de sondeo e inspección hasta 800 metros de profundidad y el control ambiental es alto. Con mi hijo que también trabajo allí nos echaron sin titubear por 20 litros de gasoil derramado en Huancamayo. Eso les da la pauta de los rígidos que son, por eso cuando hablamos de contaminación es simple, a la hora de trabajar es hacer y hacerlo bien”.
Bravo además explicó los tipos de minerales que se explotarían en Malargüe, son alabastros, mármoles blanco y marrón, aragonitos y otras sustancias que pueden estar agregados con baritina o pigmentaciones de otra naturaleza, y además se ha hallado mármol negro que reúne todas las condiciones para trabajarlo.
En la charla se explicaron los proyectos y oportunidades que tendría el desarrollo de la actividad en el departamento, con respecto a esto Silvia Calvi habló de una serie de proyectos que está trabajando para poder destrabar el desarrollo de la minería. Los mismos son la ley de la creación de un Parque Industrial Minero y Petrolero en la zona de Pata Mora, el proyecto para realizar huellas mineras, plan de ley para hacer un fideicomiso forestal y la autonomía parcial municipal en cuanto al desarrollo económico de todos los departamentos de Mendoza.
“Esto significa el crecimiento con los recursos propios, porque a nosotros a nivel provincial no nos dejan desarrollarnos. Por ejemplo en Alvear no quieren minería y yo no me meto en la ganadería de ellos, yo no se qué utilizan para tener buenas pasturas y si están contaminando o no.”
Si bien se había anunciado la participación del Ministro de Energía de Mendoza, Marcos Zandomeni, pero por cuestiones de agenda no asistió.
Mauricio Martínez, integrante de la Especifica de Minería de la Cámara de Comercio comentó a Malargüe a Diario que el objetivo de estas charlas es informar a la sociedad sobre los pro y los contra de la actividad minera, qué se quiere hacer y cómo, así la gente puede formar su propio juicio mediante el conocimiento del tema.
Los minerales que se pretenden explotar en Malargüe son piedras de aplicación, que la ley 7.722 no prohíbe; pero también se pretende destrabar las restricciones que impiden la explotación de minerales de primera categoría como el cobre y el oro ya mientras que ya se hicieron estudios al respecto en la zona de Agua Escondida por parte de la empresa canadiense Yamana Gold Inc. En referencia a la mencionada empresa, el representante de la Cámara manifestó que, en otras charlas, “ellos nos explicaron cómo explotan el oro en otros lugares, los controles que hacen, el uso mínimo del agua que realizan, y se sorprendieron por la falta de información respecto a estos temas”.
“Lo que primero que tenemos que hacer es saber del tema y luego, sabiendo, exigir como comunidad los controles necesarios. Es más, acá en Malargüe tenemos una carrera de Gestión Ambiental y sería bueno que asistieran para que nos puedan indicar las medidas necesarias para que la actividad no perjudique el ambiente”, concluyó Martínez.