En este simulacro trabajaron las distintas fuerzas de seguridad, hospital y municipio.
Ayer, a las 11:15, comenzó a sonar la alarma del aeropuerto local ya que había una emergencia, en el marco del simulacro que se realiza por lo general todos los años. Allí se simulaba que el piloto de una aeronave había dado aviso que tenía una falla por lo que se debían preparar los sistemas de emergencia ante el posible accidente al momento del aterrizaje. Para ello, se originó un incendio en un sector cerca de la pista donde habían colocado un colectivo viejo, el cual simulaba ser la aeronave y de inmediato acudió en principio el camión de bomberos del aeropuerto para sofocar las llamas.
Minutos después arribó al lugar el camión de bomberos de la policía de Mendoza para dar apoyo. Además, la policía de tránsito y Gendarmería Nacional procedió a cortar el tránsito sobre la Avenida San Martín, frente al aeropuerto y además junto a la PSA fueron ordenando la circulación de los vehículos de emergencia que iban y venían. En este sentido, las ambulancias del hospital trasladaron a los en teoría lesionados y según se podía escuchar en las radios de la policía, se fue evaluando las lesiones también de los heridos, según el grado de gravedad.
También participó del simulacro Protección Civil de la municipalidad de Malargüe, quienes acudieron con una camioneta con un chulengo con agua, para abastecer a los camiones hidrantes. Además, un camión de servicios públicos también arribó al lugar y quedó a disposición con agua por si era necesario. Esto por solicitud de la organización en el marco de la emergencia.
Mientras este simulacro se desarrollaba se le impidió el tránsito por la zona a conductores, peatones y ciclistas, para de este modo ser más operativos con la circulación de los vehículos de emergencia y evitar además posibles siniestros viales.
En el transcurso de este simulacro se pudo ver a personal tanto del municipio como del aeropuerto tomando registro de los tiempos de acción. Esto para después hilar fino y analizar cómo fue la respuesta ante la emergencia, corregir los errores y aceitar, en caso de ser necesario, la articulación entre las distintas partes que participaron de este simulacro.