Desde Pami acusan que un médico malargüino no cumple con la Ley, en tanto que el profesional de la salud se defendió y dijo que Pami es una institución corrompida.
Antes de finalizar el 2015, la subdelegada departamental de la obra social de los jubilados, Rosa Jaque, efectuó una denuncia contra los doctores Castillo, quienes la acusaron de irrumpir agresivamente en su centro médico y manifestaron su descontento con el funcionamiento de la institución que solo cuenta con cuatro clínicos para unos 3000 afiliados.