Este encuentro deportivo de veteranos fue organizado por el Club Volantes Unidos y contó con nueve equipos, donde el campeón fue el debutante Tercer Tiempo.
El sábado en la tarde, en la cancha del Club Volantes, se dio por concluido el torneo Cesar “Pato” Berger, del que participaron nueve equipos y donde se consagró campeón Tercer Tiempo, equipo que debutó en esta edición.
Allí en el sencillo pero significativo acto, la comisión del Club Volantes Unidos hizo entrega de los premios y reconocimientos. Los mismos fueron para: Primer Premio: Tercer Tiempo, segundo Ref, tercero Camping y cuarto San Lorenzo.
También se entregaron reconocimientos para Cesar “Pato” Berger por su trayectoria deportiva, para Lucho Pacheco, de Tercer Tiempo por la valla menos vencida, a Fabián, el “Abuelo”, Arroyo como goleador y el Fair play del torno para Camboyanos. Además, desde Camboyanos le entregaron una camiseta a Claudio Alejandro “Caco” Salinas, a modo de recuerdo por su paso en ese equipo.
Mientras que este sábado arranca una nueva edición, de la que participarán diez equipos, donde se jugará ida y vuelta. El nombre de este campeonato será Daniel “Lupín” Rodríguez.
Desde Malargüe a Diario se dialogó Ricky Farías, en representación del equipo ganador, quien agradeció a sus compañeros por el compromiso, a las familias y también destacó: “Para nosotros es un orgullo haber podido ganar este premio que lleva el nombre de un amigo, como es el “Pato” Berger.”
Mientras que Olsvaldo Schmidt, conocido como el “Polaco”, en representación del Club Volantes Unidos dialogó con Malargüe a Diario y al momento de hacer un resumen, a nivel general, indicó: “Es bueno, más allá que no siempre se puede dejar a todos conformas, más aún en el fútbol.”
También Olsvaldo aprovechó la oportunidad y agradeció a todos los que participaron. Para concluir, el tesorero del club organizador, destacó que han trabajado en cambiar el comportamiento dentro de la cancha y es algo que están logrando.
Desde este medio también se dialogó con Cesar Berger, quien comenzó agradeciendo: “En primer lugar le doy gracias a Dios, a mi esposa Marisa, a mis hijos Camila y Gianfranco, a mis hermanos que viven lejos pero siempre están, a los amigos que se encuentran lejos por distancia territorial pero siempre están en el corazón, a los que cuando adopté la “ciudadanía malargüina” me contaron sus sueños y me hicieron parte para hacerlos realidad.”
Continuando con sus agradecimientos, Berger afirmó: “Gracias a Roberto Guardia con su escuelita de fútbol en el Club Volantes Unidos; al Doctor Fabián Pérez que en el año 2.008, con la creación de la Liga Independiente (LIFIM), tuvimos la oportunidad de acompañar a la selección malargüina a jugar en el estadio Malvinas Argentinas, en la previa de los famosos torneos de verano.”
Además, nuestro entrevistado recordó un momento que consideró importante mencionar: “Gracias a José Luis Ramal que, en el año 2.009, con la creación de “Ruso Escuela de Fútbol” (R.E.F.) nos quedó la anécdota de que, sin tener ni un niño inscripto, pero sí con el logo de la escuela, viajamos a Buenos Aires donde nos recibieron en River Plate, All Boys y Huracán; donde pudimos conocer el trabajo de inferiores.”
Berger también reconoció a Juan Muñoz Barro, “quien me permitió trabajar en el Club Deportivo Malargüe en su primer Argentino C, y en el acompañamiento al equipo de natación.”
Teniendo en cuenta su paso por el Club San Lorenzo, el “Pato” sostuvo: “Gracias al club, cuando junto a Jorge Almonacid y Raúl Ávalos les presentamos la inquietud de formar el equipo de veteranos y nos acompañaron en todo momento, y que hoy me encuentra trabajando en Los Camboyanos, un equipo de buena gente.”
“No quiero olvidarme de agradecer a todos los sponsors que me acompañan desde hace mucho tiempo en los diferentes clubes, y principalmente, un gracias enorme a Osvaldo Schmidt y al Club Volantes Unidos, por honrarme con tan alta distinción al poner mi nombre en el campeonato que finalizó recientemente”, subrayó el reconocido deportista.
Así mismo, teniendo en cuenta que padeció una enfermedad y que gracias a la atención brindada volvió a nacer, recalcó: “Una gratitud infinita a todo el personal del hospital Malargüe, a su directora, a Martín Castro y a todas las personas que se tomaron un tiempo para orar, realizar una cadena de oración o simplemente pedir por mi salud”.