No se sienten escuchados y es un problema que se repite. Al momento de pedir ayuda caen en la burocracia y en la falta de gestión.

Ayer muchos, la gran mayoría, festejaron el Día de la Madre mientras que un grupo de vecinos vivió una realidad distinta. Puntualmente varios de ellos no solo que no pudieron festejar, sino que debieron abandonar sus hogares porque no podían permanecer allí.

Anoche, alrededor de las 21, desde Malargüe a Diario acudimos a Colonia Hípica ya que un grupo de vecinos solicitó la presencia de este medio. Previo al encuentro con los vecinos pudimos ver el fuego y la intensa columna de humo.

Al momento de dialogar con los vecinos contaron el problema que tienen con la basura que está muy cerca de sus casas y que se quema. Basura que incluye perros, caballos, vacas y otros elementos tóxicos. Ese humo es el que respiran esos vecinos.

En la entrevista contaron que deben en algunos casos abandonar sus hogares, porque es imposible vivir allí. Mientras que otros de los damnificados deben permanecer en el interior de sus viviendas con barbijos.

Llamar a los bomberos es una de las primeras opciones pero deben comunicarse primero con el 911 para que después desde la central hagan el requerimiento a la unidad a nivel local. Lamentablemente la comunicación no es buena y la ayuda no siempre llega, como anoche. Puntualmente las llamas habían comenzado desde la tarde.

Pedir ayuda a Defensa Civil es otra opción para que con una máquina tapen con tierra el incendio. Sin embargo y según el testimonio de los mismos vecinos, la respuesta suele ser que no tienen una máquina disponible, e incluso a veces ni siquiera los atienden cuando llaman o no les contestan los mensajes. Sobre esto último los mismos vecinos le mostraron a este medio cómo desde esta repartición prefieren optar por el camino de la indiferencia.

Como se dijo anteriormente, es humo contaminado y ese ese humo ingresa a los hogares, contaminando todo y aquí surge otro problema: la falta de agua. Estos vecinos no es que puedan ponerse a lavar toda la ropa de una casa, si, toda la ropa de una casa. No pueden en principio por todo lo que demanda, sino que además prácticamente no tienen agua. Los camiones de la municipalidad no les llevan, porque según dijeron, por lo general están rotos y los privados que contratan no dan abasto. Además, el agua que les llega por una manguera no tiene presión e incluso muchas veces ni siquiera tienen para tomar.

Ellos son vecinos, de nuestra comunidad, de bajos recursos y que viven, en algunos casos, como pueden. Sus historias o sus problemas no suelen ser visibilizados, o suele ocurrir que al momento de replicar lo que pasa se le da voz al sector municipal, silenciando sus testimonios.

A continuación, compartimos la entrevista completa.

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